El objetivo principal de la Danza Bethlemita es lograr la formación integral de la persona humana. Esto se consigue a través de un proceso que combina la humanización y la personalización, fomentando valores como la solidaridad, la justicia y el amor al prójimo. La danza no es solo un espectáculo, sino una herramienta para inspirar a las personas a comprometerse con su fe y con la construcción de un mundo más justo y equitativo.